La RFEA dió ayer publicidad a la lista de atletas seleccionados para representarla en los Juegos Olimpicos de Pekin y, como se esperaba, incluyendo al céltico David Gómez por los 7.336 puntos que le otorgaron, por tercera vez, el titulo nacional de decathlon en Santa Cruz de Tenerife, pese a todos los inconvenientes, mayúsculos algunos.
Despues de su primera actuación olimpica en Atenas 2004, nuestro campeón vuelve a los Juegos, pleno de satisfacción y promesas para todos los que le admiramos, por ser, además, un ejemplar atleta de club, que sabe y lo da todo cuando éste se lo requiere.
Ayer se pasó parte de la tarde en las pistas de Balaidos en plan “relax”, filmando a los participantes en el decathlon social de Balaídos, algo asi como “jugando al atletismo”, rebosantes de alegria juvenil.
Y nos dijo que estaba un poquito decepcionado por no haberse acercado a su récord de Galicia – los 7.940 puntos que le proporcionaron la medalla de oro en el Campeonato Iberoamericano de Huelva 2004 – pero es que el viento condicionó y perjudicó, como ya se temia, en las pistas de Canarias. “Era racheado la mayoria de las veces y, por ejemplo, en las vallas molestó demasiado en una carrera de técnica tan exigente, pero bueno, al fin consegui mi objetivo : la minima olimpica B”, comentaba viendo a los aprendices de atletas completos, para satisfacción grande de José Maria Odriozola, el Presidente de la RFEA, según comentario en el diario Marca. Y tambien el percance del lanzamiento de jabalina, que le anuló un tercer intento por encima de los 64 metros, perdiendo alrededor de un centenar de puntos. Pero no nos quejemos más, porque el éxito perseguido se alcanzó.
Es David el octavo atleta céltico participante en los Juegos Olimpicos – en próximas dias los recordaremos con detalle – y hay que mostrarse orgullosos y felices por esa nueva conquista deportiva de aquel chaval que nos llegó de El Rosal, de la mano de Antonio Fernández, once años atrás, aunque las lesiones, en distintos momentos de su trayectoria, le hubieran mermado bastante en su progresión.