“Toda la vida haciendo marcha”, nos dice Juan Luis Ramilo

Juan Luis Ramilo, a sus 45 años ya, “lleva haciendo marcha toda la vida”, según él mismo nos decia en las pistas de Balaidos, dias pasados. Y desde hace tambien “mucho tiempo”, enseñando e inculcando a jóvenes de ambos sexos la práctica de esta dificil y tantas veces incomprendida especialidad, que él cultiva “amorosamente”. Entre ellos, marchadores en embrión del Morrazo y Vigo.

Recordemos que este vigués de pura cepa conserva, aun, el récord gallego de 20 kmts en pista con su crono de 1h.27m.46s.4 registrado el año 1998 en Aarhus (Dinamarca), que fué 2 veces internacional con la selección española (él dice que una más, pero que la Federación Española no la tiene en su historial) y que ha cosechado tantisimas medallas
en campeonatos gallegos.

¿Sigues con ganas firmes de enseñar la marcha a los chavales? Nunca se está cansado del todo y me gustaria tener más tiempo para dedicárselo ala gente, pero mi trabajo en una empresa de Porriño me lo impide. No soy un profesional del atletismo.

¿Hay nuevos valores en pespectiva? Tengo varios de Cangas y Moaña muy buenos, que pueden llegar lejos, si perseveran y un grupo de infantiles de mucha calidad. Tambien entreno a Alvaro Paz, campeón gallego cadete en pista cubierta de salto de altura.

¿Quienes crees que han sido tus alumnos más sobresalientes ? Tuve al olimpico Santi Pérez en su época juvenil y he entrenado y entreno a medallistas nacionales como Tamara 0chogavia, Nuria Represas, Sabela Melchor y tambien a José Fernández y José A.R.Casal.

¿Le dedicas muchas horas a la marcha? Todas las que puedo e incluso voy al Morrazo una vez por semana, pues una semana trabajo por la mañana y otra por la tarde. Quiero persistir mientras que el cuerpo y el ánimo me mantengan a pié firme.

Se habrá hablado, a veces, de su carácter fuerte, pero nosotros lo estimamos y admiramos, porque él lo vale y lo merece. Su esfuerzo y amor al atletismo están ahi, presentes cada dia. Por ello, es justo que las gentes del atletismo le rindamos tributo de afecto y admiración.